Pide que le diga a 'papá que me perdone si no opino como él'. Le dice que desde que supo que habían intentado forzar las puertas de su casa, debió volver a Santiago. No habido ningún carabinero, porque han estado acuartelados, sin hacer servicio de vigilancia en las calles. Y Armando debería vigilar a los dependientes. Cuenta que continua la paz en Santiago, hasta la noche. 'Los estudiantes dicen que no quieren al gran (?); los comunistas ni a ese ni a Don Ladislao Errázuriz'. Lo malo es que, quien debiera mandar el ejercito, se niega a continuar, y el gobierno a tenido que aceptar la renuncia. Cuenta que no a vuelto a ver a Pancho. Manda saludos y abrazos